La estimación del esfuerzo de las tareas es la tarea más delicada de la planificación de proyectos, ya que una mala estimación puede llevarnos a resultados totalmente erróneos en cuanto a la planificación global del proyecto. Por ello, cuando realicemos la estimación de cualquier tarea debemos planificar varios escenarios posibles, el optimista, el esperado y el pesimista. De esta manera en lugar de dar fechas fijas para la planificación del proyecto daremos rangos de fechas, mucho más realistas que una fecha única.
Para estimar el esfuerzo de una tarea debemos fijarnos en los siguientes factores:
El tamaño: El número de requisitos a implementar, el número de pantallas, listados a desarrollar, el número de servicios a implementar, el número de interfaces con otros servicios/aplicaciones, etc. es el primer factor a tener en cuenta a la hora de considerar esfuerzos.
La complejidad: Además del tamaño, debemos tener en cuenta la complejidad. No todos los formularios son iguales, no sólo influye el número de campos a implementar, sino también la dificultad de la implementación. No es lo mismo el desarrollo de una interfaz a un servicio sencilla que compleja.
La experiencia: Cuenta con personas experimentadas en cada una de las tareas del proyecto. Ayúdate de la experiencia de analista de requisitos, arquitectos, analista de datos, programadores, tester etc para estimar las tareas que les incumban.